Gracias al imparable desarrollo tecnológico, a nivel comunicativo, las puertas hacia prácticamente cualquier rincón de la sociedad se han abierto de par en par, dejando entrever, en ocasiones, situaciones de discriminación racial. Internet es una ventana abierta al mundo, donde la interactividad entre personas de diferentes lugares, culturas e ideas conviven en el espacio virtual. Es por ello que muchos consideran que en Internet se encuentran muchas situaciones de discriminación racial y cultural. Pero, indudablemente, ese espacio infinito que conforma Internet tiene otras características que ayudan y fomentan la convivencia entre todos. Lo único que hay que hacer es saber utilizarlas de la manera más tolerante.
Los medios de comunicación, tanto en soporte digital como en papel, contribuyen al igual que Internet, directa o indirectamente, a mantener ciertas situaciones lábiles. El lenguaje que utilizan los medios de comunicación puede ser entendido como intolerante en ciertas ocasiones. Y esto, es lo que verdaderamente nos debe empezar a preocupar, puesto que los mensajes que transmiten los medios a la opinión pública pueden llegar a estigmatizar a ciertos colectivos culturales y raciales.
En estas dos últimas noticias, que versan sobre lo mismo, vemos un tratamiento
del lenguaje diferente. La nacionalidad sale a relucir por un sujeto afectado
de la misma; el detenido presuntamente por intentar quemar a su mujer e hijo (en la noticia publicada por El País). ¿Qué importancia tiene la nacionalidad
cuando la relevancia de la noticia radica en el presunto delito que ha
cometido? De tener algún tipo de importancia, ¿por qué no se expone, del mismo
modo, la nacionalidad del resto de sujetos afectados?
El periódico ABC
obvia la nacionalidad del detenido y del resto de sujetos afectados en la
noticia. Esto no es distintivo ni característico de un periódico u otro, pero
muestra que la discriminación en estas situaciones lábiles se produce a partir
de la asimilación del suceso con el origen de quienes lo han realizado, creándose
una conciencia social inconsciente, cuando lo que tendría que haberse producido
es la reprobación del acontecimiento.
A partir del lenguaje se puede crear una igualdad plena de convivencia. Y puede hacerse porque éste tiene cierta autoridad ética y moral que se manifiesta por las personas que de él hacen un buen uso. Qué mejor ejemplo pueden dar los profesionales de la comunicación a la sociedad que saber utilizar el lenguaje, símbolo que nos caracteriza y define como persona.
PD: Reflexiones obtenidas tras la elaboración de un trabajo para la universidad. El tema me parece sumamente interesante y quería compartir mi punto de vista sobre el tratamiento que dan los medios a ciertos colectivos y que da lugar a situaciones lábiles que se pueden evitar con el buen uso del lenguaje. Y tú, ¿qué piensas?
Yo estoy de acuerdo contigo, la nacionalidad o la raza es un dato que se usa en base a prejuicios. Sin embargo, también creo que es un dato que puede tener relevancia a la hora de dar explicaciones sobre el suceso en cuestión, aunque en pocas ocasiones le veo cabida en el titular o acompañando al primer sujeto de la noticia. Se puede decir perfectamente que un hombre mata a su pareja y, párrafos más abajo, explicar la procedencia de la familia, cómo llegaron a España, etc. Datos que sirven para completar la noticia, pero en absoluto para justificarla.
ResponderEliminarUn tema interesante, que da para mucho. Espero que el trabajo en el que lo desarrollaste fuera bien.
Claro Juan, yo creo que dependiendo del "cariz" que tome la noticia tendrá cabida y relevancia ese dato. Estoy totalmente de acuerdo con tu comentario. Desgraciadamente, viendo ciertas noticias, se justifican estas cuestiones que nada tienen que ver con la noticia en sí y me parece lamentable.
EliminarMuchas gracias Juan, un saludo.